Con un poco de retraso, debido a que no fue muy grata la experiencia, he decidido finalmente seguir publicando las inmersiones, sobre todo porque después de este fin de semana estoy bastante más animado en el tema. Pero vamos a esta que es la que toca.
En primer lugar, la inmersión tuvo lugar en Sancti Petri. El centro estaba situado en el Poblado de Sancti Petri, que está situado en una pequeña extensión de tierra, casi como una isla, unida por una carretera, y en la que solamente hay edificaciones viejas y derruidas, pendientes de ser restauradas una vez prohibida la urbanización por la Ley de Costas.
Una vez dicho esto (me he extendido un poco porque no tengo mucho más que contar...), la inmersión se realizó con una temperatura bastante fría, lo que provocó el mareo y la subida anticipada de Moni.
La visibilidad era bastante mala, y esto unido al empañamiento de las gafas (Nota Mental: recordar siempre siempre siempre la saliva en las gafas antes de bajar), provocó que apenas viera nada. Prácticamente estuve toda la inmersión pendiente de no perder de vista la botella blanca del guía, y de ver a mi compañera, que con su obsesión de estar pendiente de mi, y que yo no me preocupara por otra cosa más que bucear, me hacía complicado que le siguiera la pista al estar siempre encima y detrás mía.
Apenas se pudieron ver peces, algún Mero, y lo más destacado, una gran Langosta. También hubo un bonito momento en el que a través de un arco formado por rocas, se tenía la visión de tener una pecera delante (esto relatado por toda la gente de la inmersión, porque yo no veía ni dos palmos...).
La inmersión la realicé con una botella de 15L y una presión de 200, y subí con bastante presión ya que al no ver nada y al frio que hacía, adelanté un poco la ascensión. Al no tener visión directa con mi compañera y subir ella antes por el frio, subí con el Killo, un poco preocupado por ella al no saber donde estaba. De todas formas realizamos la subida con una bolla estanca, y con otra pareja que nos marcó los tiempos al carecer de ordenador de bucéo.
A pesar de todo el Centro me causó grata impresión, ya que estaba bien ubicado, las instalaciones eran buenas y los monitores bastante majetes y alegres. Nos tuvieron que arreglar el regulador ya que no funcionaba correctamente.
En este otro enlace se realiza una descripción más histórica, y también se puede leer que la inmersión técnicamente es difícil. Quizás no estaba preparado todavía ...
En primer lugar, la inmersión tuvo lugar en Sancti Petri. El centro estaba situado en el Poblado de Sancti Petri, que está situado en una pequeña extensión de tierra, casi como una isla, unida por una carretera, y en la que solamente hay edificaciones viejas y derruidas, pendientes de ser restauradas una vez prohibida la urbanización por la Ley de Costas.
Una vez dicho esto (me he extendido un poco porque no tengo mucho más que contar...), la inmersión se realizó con una temperatura bastante fría, lo que provocó el mareo y la subida anticipada de Moni.
La visibilidad era bastante mala, y esto unido al empañamiento de las gafas (Nota Mental: recordar siempre siempre siempre la saliva en las gafas antes de bajar), provocó que apenas viera nada. Prácticamente estuve toda la inmersión pendiente de no perder de vista la botella blanca del guía, y de ver a mi compañera, que con su obsesión de estar pendiente de mi, y que yo no me preocupara por otra cosa más que bucear, me hacía complicado que le siguiera la pista al estar siempre encima y detrás mía.
Apenas se pudieron ver peces, algún Mero, y lo más destacado, una gran Langosta. También hubo un bonito momento en el que a través de un arco formado por rocas, se tenía la visión de tener una pecera delante (esto relatado por toda la gente de la inmersión, porque yo no veía ni dos palmos...).
La inmersión la realicé con una botella de 15L y una presión de 200, y subí con bastante presión ya que al no ver nada y al frio que hacía, adelanté un poco la ascensión. Al no tener visión directa con mi compañera y subir ella antes por el frio, subí con el Killo, un poco preocupado por ella al no saber donde estaba. De todas formas realizamos la subida con una bolla estanca, y con otra pareja que nos marcó los tiempos al carecer de ordenador de bucéo.
A pesar de todo el Centro me causó grata impresión, ya que estaba bien ubicado, las instalaciones eran buenas y los monitores bastante majetes y alegres. Nos tuvieron que arreglar el regulador ya que no funcionaba correctamente.
En este otro enlace se realiza una descripción más histórica, y también se puede leer que la inmersión técnicamente es difícil. Quizás no estaba preparado todavía ...
Datos Técnicos
Fecha 09/07/2009
Hora Entrada 10:18
Hora Salida 11:00
Lastre 8 Kg
Bar Entrada 220
Bar Salida 90
Profundidad 22 m
Tiempo de fondo 45'
Temperatura Fondo 19º
Visibilidad Mala
Fauna y Flora Nudibranquios, Gorgonias Blancas/Rosas, Esponjas
Fecha 09/07/2009
Hora Entrada 10:18
Hora Salida 11:00
Lastre 8 Kg
Bar Entrada 220
Bar Salida 90
Profundidad 22 m
Tiempo de fondo 45'
Temperatura Fondo 19º
Visibilidad Mala
Fauna y Flora Nudibranquios, Gorgonias Blancas/Rosas, Esponjas
5 comentarios:
Qué pasada de experiencia! En serio, para mí merece la pena aunque no hayas visto mucho. Sólo por hacer lo que has hecho...
Espero volver y ver los cañones, jajaja
Anda Julito, en mi tierra, ¿y nadie te contó la historia del poblado? Porque el poblado tiene muchos muchos años de historia, y mucha historia. No te lo puedes ni imaginar :)
Siento que no hayas podido ver mucho, normalmente está el agua muy muy clara.
Hola Morgana. Si que me contaron algo acerca del Poblado, de hecho el centro de buceo estaba allí. Sería bonito que lo arreglaran y lo restauraran todo un poco para disfrutar de él, pero sin masificaciones ni edificios por favor.
Los pocos edificios que ves allí son restaurados para el turismo (clubs náuticos, asociaciones de pescadores y nada más), y que hace 50 años era un poblado lleno de vida en torno al atún rojo y a su conserva. Ahora no se puede entrar en las calles, sólo por los alrededores por riesgo de derrumbe, y ya se está empezando a restaurar cosas (creo que hace poco que ha pasado ya al pueblo de Chiclana de la antigua propiedad privada), por ejemplo la iglesia. Si se hace algo, no creo (y espero) que se haga para los turistas, más bien para los marineros y para la gente de Chiclana. Un museo del atún y el mar no estaría mal, fueron los fenicios los primeros que empezaron a coger el atún rojo en las almadrabas.
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